Le agradecemos como siempre a Francisco por las "caricaturas sin monitos": LA HORA NACIONAL.. Caricatura sin Monitos Con las manos llenas de jabón, lavando una lechuga, me sorprendió el inicio del programa que comienza a las diez de la noche todos los domingos. Recordando las palabras de Ulises, le ofrecí mi sacrifico a Diosito con tal de que lo quite, y me aguante sin desconectar la radio. Primero vino el resumen de lo que iban a tratar durante el programa. En ningún momento, hablaron del aniversario de la Revolución Mexicana. El invitado especial fue, un cantautor de temas infantiles. A las diez de la noche en domingo, me imagino que los pequeños de las casas deben estar esperando impacientes a que den las diez para poner el radio en su estación favorita. Muy simbólico, ¿no les parece? Ya ni la burla perdonan, nos tratan como enanos... mentales. Quizás, Ulises no caiga pronto, porqué no resistí más que veinticuatro minutos. Ellos saben, que mochando el águila del escudo nacional, subliminalmente aceptamos nuestra dilución. Ellos saben, que no celebrando una fecha tan importante en la historia del país, la iremos olvidando; pero sobre todo, evitaremos seguir el ejemplo. Lo que, ellos no saben, es lo siguiente: ya llegó, LA HORA NACIONAL. Más no confundir, con la hora de unión de todos los mexicanos (pues, apagamos el radio todos). Me refiero, al momento histórico que vivimos. Y no tan sólo hablo de organizar un desfile, que ya de si es mucho merito. Sino, más bien, a que la sociedad ha tomado la iniciativa de sostener al país. Así como lo leyó. Y que mejor, que no borrando su pasado, pues, quien olvida lo vivido, corre el gran riesgo de cometer los mismos errores. Esto, no lo saben los barones del dinero. A través de una disposición ejemplar y pacifica, no tan sólo se mantiene el desfile tradicional, sino que se agregan elementos que ayudan a la comprensión del hecho mismo que se conmemora. En estos momentos, las once de la noche, hay personas vestidas como federales (la PFP de aquellos días) y como revolucionarios (los abuelos de los APPOS) en la Alameda central de la ciudad de México. Montones de paja y caballos, los rodean. Intentan quitarse el frío, con harto café de olla. Sin leche desde luego. Vale la pena ver el espectáculo que se montó. Bien por los compañeros de "la Resistencia Creativa". Aplaudo a la sociedad mexicana que desea vivir plenamente, el tramo histórico que le toco caminar. Demos gracias a la vida, de poder estar en el proceso transformador que nuestro querido MÉXICO, necesita con urgencia. "Muchos, quisieran esconder de sus conciencias el reproche. No pueden, aunque compren el perdón de sus pecados..." Doña Prudencia [+/-] muestra/oculta esta entrada

Por : trueeyes