Y seguimos con las notas
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Crónica: Resistencia civil pacífica ? Zócalo capitalino El presidente fantasma El pueblo rudo del líder amarillo lo unge como mandatario. Es Andrés Manuel con sus huestes en el corazón del país y la advertencia de lo que está por venir: "Contra un gobierno usurpador, un gobierno paralelo". 28-Agosto-06 Juan Pablo Becerra-Acosta M. "Milenio Diario" El revolucionario explicaba a su pueblo fiel lo que seguiría en su temeraria batalla: ?Vamos a esperar la decisión del Tribunal Electoral, pero si se consuma el fraude, si se convalida a un presidente espurio, sería un atropello a la voluntad del pueblo, lo que significaría la ruptura del orden constitucional, y un Golpe de Estado? Y si es así, ¿qué hacemos? (?¡La revolución!, ¡La revolución!?, le gritaban los duros de su pueblo.) En ese caso ?seguía el rebelde?la Convención Nacional Democrática deberá decidir, el 16 de septiembre, si elige a un Presidente de la República legítimo, a un Jefe del Gobierno en resistencia, o a un Coordinador Nacional de la Resistencia? El pueblo rudo del líder amarillo no tenía dudas de lo que deseaba: ??¡Pre-si-dente, pre-si-dente, pre-si-dente!?? vociferaban miles de gargantas congregadas en una cuarta parte de la plancha del Zócalo. ?No, no me contesten ahora. Se tiene que analizar porque se trata de un acontecimiento histórico? les decía a sus incondicionales el caudillo rebelde. Pero nada, no le hacían caso. Los subversivos del ya casi olvidado voto por voto tenían claro cuál era su ungimiento: ?¡Pre-si-dente, Pre-si-dente, Pre-si-dente!?, corean una y otra vez esos hombres, mujeres, ancianos, y jóvenes (y algunos niños), que tenían miradas furiosas, agraviadas, ojos con rabia que provocaban palabras cada vez más duras contra quienes suponen que han organizado un mayúsculo fraude electoral: cada vez que su líder mencionaba nombres como ?Fox? o ?Calderón?, el pueblo duro del héroe popular estallaba en sonoras mentadas de madre, en virulentos insultos. Eran gargantas desgañitadas que sentenciaban: ?¡Traidores de la democracia!?. El mesías del pueblo que se dice robado insistía: ?No, no, no me contesten ahora: eso se tiene que analizar en todo el país para que se decida en la convención? Pero la gente no cedía. Al estilo de Gran Bretaña, donde el candidato perdedor de los comicios generales forma un gabinete fantasma, un gabinete a la sombra, Andrés Manuel López Obrador había sido ungido ya por su pueblo duro como presidente fantasma de un gobierno a la sombra. Un camarada amarillo sintetizaba en su cartulina lo que vendría en un sexenio de tinieblas revolucionarias: ?Contra un gobierno usurpador, un gobierno paralelo?. ?¡Es ahora o nunca!? alebrestaba a su masa el próximo jefe de Estado de las Calles. ?¡Duro! ¡Duro! ¡Duro! ?respondía su tropa con los puños en alto, las miradas decididas, y avisaban con elevados decibeles: ?¡Si-nohay-solución, habrá-revolución!?. ?¿A poco señora?? le preguntaba a una cuarentona chaparrita, dura en su rostro moreno. ?Al único que reconocemos como presidente es a ése de ahí, que les quede bien claritito?señalaba hacia el templete. Hacia el Presidente Fantasma que convalidaba: ?¡No voy a traicionar al pueblo! ¡No voy a claudicar! ¡El pueblo que quiere ser libre, lo será! (Benito Juárez)?. Y luego citaba a Gandhi: ?Primero te ignoran. Luego se ríen de ti. Después te atacan. Entonces ganas?. ??¡Pre-si-dente!, ¡Pre-si-dente!, ¡Pre-si-dente!?, estallaba en adoración su humillado pueblo fantasmal? *** Similar a lo que acontecía en 1810, y luego en 1910, ahora el pueblo pejelagartiano en rebeldía vuelve a echar mano de la Virgen de Guadalupe. Por encima del mar de cabezas se levanta de nuevo un trío de estandartes con vírgenes morenas. Dos de estos, con la imagen tradicional. El otro, herético para los católicos: se aprecia a la Virgen de Guadalupe levemente sonriente, con la mano derecha estirada para depositar en una urna un voto que dice ?AMLO?. Más abajo, la leyenda: ?La Virgen de Guadalupe, la Madre de todos los plantones?. ?En la Iglesia se van a enojar, señora? le digo a la portadora. ?La Virgen no es propiedad de ellos (señala hacia Catedral), es de todo el pueblo, y nosotros somos pueblo. Una compañera de ella iza una pancartita complementaria: ?La Iglesia está con el PAN y Dios está con el pueblo?. Con el pueblo del presidente fantasma que oraba: ?¡Obrador-Obrador-Obrador!? ?¡No-estás-solo, no-estás-solo!?. Y sí, ahí estaba el núcleo duro del Presidente Fantasma, un pueblo que, con sendas cartulinas, explica a quienes no comparten o comprenden su lucha: ??No me odies por tener los güevos de defender la democracia?. ??Los pinches indios y nacos estamos defendiendo la democracia que han llenado de mierda?. El presidente fantasma y su excitado y decidido pueblo duro que lo ha ungido? Disparo Pancarta en el Zócalo "La Iglesia está con el PAN y Dios está con el pueblo." [+/-] muestra/oculta esta entrada |